Agradecimiento

Sucedió lo imposible!

Hoy me levanté a la hora de siempre, esperando que fuera un día normal, de esos que han sucedido durante todo el aburrido aunque necesario periodo vacacional. Me senté a la mesa y me hice un sandwich que no me quitó el hambre. Acto seguido, fuí a la cocina, saqué un baso del lugar donde los guardan, abrí el refrigerador y saqué el jugo de piña; regresé a la mesa y me bebí el cartón -bueno, el contenido.

me encontraba en el trance que producen en mí los jugos, cuando el teléfono me sacó violentamente de él. Al contestar, entré nuevamente en trance, aunque esta vez no se debía al jugo, sino a que era la voz de Bere la que salía del teléfono!! Muy lindo detalle: "Sólo quería saludarte, saber cómo estás".

Cuando parece que ya nada puede sacarme del hoyo, llama o se aparece en persona.